Free Cursors Sondra Twilight Fanfics: EL OTRO LADO DE LA LUNA - CAPITULO III

sábado, 19 de septiembre de 2009

EL OTRO LADO DE LA LUNA - CAPITULO III

 
Desaparecido.


Creo que mi mandíbula inferior se separo del resto de mi cara, todo a mi alrededor se detuvo, no escuchaba las voces ni podía ver los rostros, todo estaba cubierto por un velo que lo hacía borroso a mis ojos que solo la veían a ella, era la mujer más hermosa que había visto en mi vida, en películas, en libros o revistas, en la TV o en los desfiles de moda, mi mente no lograba ubicar otro rostro como aquel, ni siquiera en los concursos de belleza que Alice más de una vez nos había obligado a ver a todos en casa.
Y entonces como si escuchara mis pensamientos levanto su mirada hacia mí y me miro fijamente con evidente curiosidad. No pude apartar mi mirada de sus ojos, eran… eran dorados idénticos a los del joven que ahora se sentaba junto a ella en la mesa. Eran extraños pero lucían perfectos en el rostro que los enmarcaba, era tan blanca como porcelana y debía ser sumamente suave al tacto, su nariz era perfilada y tenía una boca con labios carnosos que invitaban a besar, eso quería yo besarla. Cuando volteo la cara hacia el chico que le hablaba un mechón de su cabello salió de detrás de su oreja y cayó sobre su cara, era castaño oscuro muy brillante y suavemente ondulado, caía a la mitad de su espalda.
Es que había algo en esa chica que no fuera perfecto, seguramente tenía una risa chillona o cojeaba de un pie, aun no la había visto caminar.
Ni idea de cuanto tiempo pase así sin mover un musculo pero de repente un fuerte golpe en el hombro y la voz de Jacob me sacaron de mi ensoñación.
-          Edward, Edward hermano ¿estás bien?
-          Oh… si, no me pasa nada Jake – mi voz fui apenas audible.
-          Te has quedado como desconectado, ¿seguro te sientes bien?
-          Claro que si tranquilo, comamos algo antes de que suene la campana.
Alice, Rosalie y Jasper ya se encontraban en la mesa con Quil y Embry y caminando detrás de nosotros venían Claire, Leah y Seth.
Obviamente el tema central de la conversación eran los nuevos estudiantes por lo que no necesite disimular las muchas veces que volví mi mirada hacia ella.
Definitivamente el gigantón que estaba con ella tenía que ser su hermano, eran demasiado parecidos, el color de la piel y más aun el color de los ojos.
Como si pudieran adivinar que la campana estaba por sonar se levantaron de la mesa y caminaron a la salida, por supuesto pude comprobar que si era perfecta, los dos caminaban con una gracia casi gatuna y hasta en la forma de moverse eran muy parecidos. Cuando pasaron junto a nuestra mesa ella me miro, había algo en sus ojos que no fui capaz de leer, parecía querer saltarme encima, ese hubiese sido mi sueño hecho realidad. Oh si claro seguramente estaba loca por mí y nos casaríamos, tendríamos hijos, nietos, bisnietos. El sonido de mi propia risa me saco de mi fantasía y al mismo tiempo la hizo desviar su mirada.
Rosalie aun refunfuñaba cosas de la chica nueva cuando sonó la campana y todos salimos de la cafetería a nuestras respectivas clases.
-          Ahora me toca la clase de biología, dime por favor que es tu próxima clase, al menos podre contar contigo como compañero de laboratorio. – dijo Jake con ojos de cachorro suplicante.
Le di una ojeada a mi horario y asentí viendo como se le iluminaba el rostro a mi amigo.
-          Ya que no tenemos aun los repuestos de la camioneta deberías ir a casa esta tarde, así mi madre te regresaría tu espacio en su testamento – le dije riendo.
-          Eso sería estupendo y además ya me hace falta una de sus deliciosas comidas – agrego pasando la mano por su estomago y relamiéndose como si imaginara lo que quería comer.
Cuando entramos al laboratorio de biología Jake se apresuro a tomar una de las mesas de hasta el fondo lo seguí de forma automática. Cuando ya me había sentado vi al grandulón entrar al salón, de inmediato la busque detrás de él pero recordé que Alice había dicho que estaba en una clase con ella así que perdí la esperanza de verla.
Obviamente nadie se sentó en la mesa con el alumno nuevo, era demasiado amedrentador y nadie tuvo el valor de intentarlo siquiera. Como el grupo de clase estaba impar, nadie se vio obligado a compartir el laboratorio con él, lo que pareció hacerlo sentir bastante cómodo. 
El profesor Banner entro y coloco su maletín junto al escritorio en el suelo y abrió una carpeta que traía en  las manos leyó su contenido por unos segundos para luego preguntar
-          ¿Sr. Mc Carty? ¿Emmett Mc Carty?
Levanto la vista hacia al grupo en busca de respuesta al momento que el aludido contesto
-          Por aquí -  mientras levantaba la mano. Su voz era fuerte y segura pero con un agradable tono musical, era bastante extraña.
La expresión del profesor paso de la sorpresa al pánico en segundos, lo que disimulo lo más rápidamente que pudo y agrego con voz algo temblorosa que trataba de sonar amable.
-          Eh… bienvenido a nuestra escuela Emmett.
El solo asintió y esbozó una pequeña sonrisa.
El profesor retomo la clase con normalidad y fue más de lo mismo, una introducción a la materia del semestre, los textos recomendados, bla, bla, bla, bla. Creo que mi mente estaba en otro lado.
Al terminar la clase camine con Jacob al gimnasio para mi última clase del día, educación física, era una de mis clases favoritas ya que era realmente bueno en los deportes y podía relajarme del resto de las clases. Normalmente Jake y yo formábamos equipo y arrasábamos con todos los demás equipos. El entrenador Clapp nos había ofrecido villas y castillas para que entráramos al equipo de basquetbol de la escuela pero era algo que no iba con nosotros, ser los populares atletas de la escuela rodeados de porristas bobas más bien no era nuestro estilo.
Ya era otro cuento si nos tocaba enfrentarnos en deportes individuales, nuestro espíritu competitivo era realmente alto y nos esforzábamos al máximo por aplastar al otro, eso era textual en deportes de contacto. Si alguien que no nos conocía nos veía juraría que éramos enemigos naturales. Lo realmente bueno de todo era que inmediatamente que terminaba la competencia volvíamos a ser los mismos de siempre sin importar quien derrotara a quien.
Salimos de los vestidores después de cambiarnos y entramos al gimnasio, para escuchar al entrenador Clapp llamando a todos los alumnos a formar equipos, nos tocaban prácticas de voleibol, Rápidamente Jake, Quil, Embry y yo formamos un equipo al que se unió Leah.
Había tenido poco trato con Leah fuera de la escuela, era una chica agradable y bastante simpática pero estaba casi todo el tiempo en la reservación con su novio Sam, era fácil estar con ella y era un beneficio extra la distracción que podía causar en los chicos de otros equipos ya que además era muy bonita. Era el toque que le faltaba a nuestro equipo para ser una combinación invencible.
La hora paso con rapidez y después de aplastar a todos los equipos que tuvieron la mala suerte de enfrentarnos, nos fuimos a los vestidores.
Salimos al estacionamiento comentando aun como aplastamos al equipo de Mike Newton gracias a un movimiento de Leah, al mirar hacia el auto de Alice me quede con la boca abierta al verla hablando con ella, no pude dar un paso más. Conversaban alegremente y no pude evitar notar la expresión de pocos amigos de Rosalie que las miraba de reojo a unos pocos metros de ellas y del otro lado del estacionamiento el grandulón la observaba a ella de una manera bastante sugestiva, parecía querer comerla, textualmente.
Cuando recupere en control de mi cuerpo camine hacia ellas y escuche su voz que le respondía a una sugerencia de mi hermana
-          Me parece muy bien Alice, en la semana nos ponemos de acuerdo para reunirnos y hacer el informe -
Cuando estuve a unos tres metros de ellas note una reacción en su cuerpo, cerró los ojos e inhalo fuertemente y luego todo su cuerpo pareció tensarse para inmediatamente girar su rostro hacia mí, todo esto en menos de un par de segundos, seguramente solo yo había notado su reacción o aun más seguro lo había imaginado.
Se despidió de Alice y antes de que mi hermana pudiera contestarle emprendió su camino hacia donde su hermano la esperaba, aun me refería a el como su hermano con la esperanza que no fueran otra cosa.
Alice me miro y sonrió mientras decía
-          Ah hermanito ya te esperaba, pensé que te quedarías en el gimnasio toda la tarde. ¿Nos vamos ya? -
De inmediato noto algo en mi y siguió la dirección de mi mirada que por supuesto estaba puesta en el movimiento de cadera al caminar de aquella chica. Me pego suavemente en la frente para llamar mi atención y arrugo un poco el ceño a manera de regaño por mi evidente descaro.
-          Eh… si vámonos Jake – grite a mi amigo.
-          ¿Vienes con nosotros a casa? – pregunto mi hermana encantada mirando a Jacob – mamá se alegrara mucho de verte - luego miro a Rosalie que aun tenía el ceño fruncido – nos vemos mañana – soltó esto con tono de reproche escondido.
Rosalie asintió sin decir palabra y se despidió con la mano mientras seguía a Jasper, quien le lanzaba besos por el aire a mi hermana, al auto de ellos.

Cuando llegamos casa mi madre estaba terminando de arreglar la sala, todo estaba impecable, como siempre debo agregar. Estaba tan concentrada en sus quehaceres que no noto nuestra llegada hasta que la voz de Jacob la hizo mirar en nuestra dirección.
-          Esta debe ser la casa más limpia y bonita de Forks – remarco lo de “bonita” de manera halagüeña mientras mamá corría hacia a él con los brazos abiertos.
-          Del mundo – agregue en voz baja, Alice asintió y rio por lo bajo.
-          Oh Jacob mi niño – logro decir mientras lo estrechaba fuerte entre sus brazos.
-          Mama Esme, yo también te extrañe mucho – musito Jake respondiendo su abrazo.
-          ¿Supongo que te quedaras para la cena? Estoy preparando un asado que les va a encantar – dijo esto caminando a la cocina.
-          Estaremos en mi cuarto si necesitas algo mamá – le grite.
-          De acuerdo cariño, cenaremos cuando llegue tu padre – la escuche decir mientras subíamos las escaleras.
Me tire en la cama y encendí el televisor mientras Jake se fue directo a mi computadora para revisar su correo.
Estaba haciendo zapping sin poner realmente atención a los programas que pasaban en la tele.
Tenía su cara grabada en mi mente, su boca, su ojos, su cuerpo todo de ella parecía invitarme  a tocarla, inclusive su voz. Recordé el momento en que la escuche mientras hablaba con Alice y mis oídos se llenaron del sonido suave y aterciopelado de su voz parecía estar cantando en lugar de hablando.
Jacob me llamo y me hizo regresar a la habitación. Me mostro unos correos graciosos que le habían enviado pero noto la distracción en mi ojos.
-          Ed, ¿estás realmente distraído hermano? ¿pasa algo? Has estado fuera de ti desde el almuerzo – entonces el entendimiento inundo su mirada y un brillo de picardía subió a sus ojos – la chica nueva – lo escuche decir más para sí mismo que para mí.
Yo me sorprendí un poco pero asentí. Solo él y Alice tenían esa capacidad de leerme tan fácilmente. Seguramente el interrogatorio del pequeño monstruo no se haría esperar.
-          Bueno es muy bonita hombre, yo mismo debo haber babeado un poco cuando la vi, pero a ti te afecto mucho mas – afirmo esto con una amplia sonrisa – ya era hora que apareciera la mujer que hiciera temblar las rodillas de Edward Cullen – soltó esto antes de doblarse en una carcajada que me hizo enfadar un poco.
-          Tienes toda la razón Jake – di un brinco al escuchar la voz de mi hermana que se encontraba recostada contra el marco de la puerta de mi cuarto evidentemente divertida por la escena que tenia ante sus ojos – se llama Isabella Swan, ella y su familia vivían en Francia y se han mudado a Forks hace solo un par de semanas. es bastante agradable hermanito, se que seremos buenas amigas – dicho esto se volteo y se fue a su cuarto.
Swan, el nombre del grandulón no era Swan, ¿Cómo era? Trate de recordar al profesor Barner diciendo su nombre Em… Emmett Mc Carty. No eran hermanos eso ya era evidente pero tenían que ser familia eran demasiado parecidos entre sí.
-          Ya Ed cuéntame – me insto Jake.
-          Bueno la verdad no hay mucho que contar, no entiendo muy bien que me pasa. Hay algo en ella que me llama, estoy sorprendido por mis reacciones. No he podido sacarme su imagen de la cabeza en toda la tarde.
Jake se esforzaba por no soltar una carcajada asintiendo en mi dirección cuando escuchamos la puerta de entrada abrirse en el piso de abajo y mi padre saludo a mamá que un par de minutos después nos llamo para cenar.
La cena estaba deliciosa y conversamos todos tranquilamente.
-          Te agradezco no volver a abandonarnos por tanto tiempo Jacob – le dijo mamá con tono amenazador que luego paso a maternal – siempre haces falta por aquí.
-          Debo decir que extrañaba todo en esta casa pero la comida es lo que más – dicho esto recostó la cabeza en el espaldar de la silla y paso su mano por su estomago – aunque hoy ya no puedo comer un bocado más.
-          Ah que lastima – le contesto mamá levantándose para ir de nuevo a la cocina – tengo un pie de limón que hice en la tarde enfriándose en la nevera.
Jacob se incorporo de inmediato
-          Ah en ese caso creo que tengo un pequeño espacio que podemos llenar con un pedazo de pie.
Todos reímos.
El día siguiente en el instituto no fue nada fuera de lo común, nos asignaron algunos quehaceres pero nada que necesitara de un muy alto coeficiente intelectual. Eso fue un alivio para mi cabezota ya que no podía concentrarme en nada por mucho tiempo.
Yo solo pensaba en la hora del almuerzo, sabía que tenía que verla en la cafetería.
Jacob no me lo hizo nada fácil, las pocas veces que coincidí con él durante la mañana solo me preguntaba si la había visto o que tan nervioso estaba o si sentía maripositas en el estomago, gran cantidad de babosadas que solo lograban que lo amenazara con el puño cerrado más de una vez.
-          Está bien hermano cálmate, estas más sensible que de costumbre el día de hoy – solo logro completar la frase mientras corría a toda velocidad huyendo de mi, en ese momento creo que lo hubiese golpeado de verdad.
Cuando me dirigía a la cafetería Alice me esperaba en la entrada, Jasper y Rosalie estaban con ella. Los tres soltaron una carcajada mirando a mis espaldas, cuando busque la razón de sus risas vi a Jacob ondeando un pañuelo blanco sobre su cabeza y gritando.
-          Vengo en son de paz cara pálida, sería muy aburrido no almorzar contigo.
A las risas de los tres primeros se sumaron Quil, Embry y Claire que venían detrás de Jake.
-          Black creo que hoy en día te esta estorbando la vida – fue lo único que pude decir antes de que mi seriedad se fuera al caño y me uniera a las risas de todos no sin dejar atestarle un buen puñetazo en el hombro.
Seth y Leah ya estaban en la cafetería y nos llamaban para que nos sentáramos con ellos. Tomamos algo de comer y nos dirigimos a la mesa donde estaban nuestros amigos.
Mientras caminaba la busque con la mirada por toda la cafetería, no estaba.
Alice noto inmediatamente que algo buscaba y se acerco a mi oído para decirme.
-          La vi con su primo sentada en las escaleras del segundo piso cuando salimos de clase, cuando le pregunte si venían a la cafetería me dijo que ya habían comido algo y que se quedarían para conversar sobre algo que tenían que hacer.
Como siempre el pequeño monstruo me había leído como un libro abierto.
-          Eh… ¿has dicho su primo Alice? – pregunte esto con una creciente sensación de alivio en mi interior.
-          Si, su primo Emmett – me respondió – el chico nuevo de tu grupo.- Esto explicaba el evidente parecido entre ellos.
Al notar que Jacob que nos miraba supe que él también se había dado cuenta de todo.
El almuerzo paso rápidamente ya que la razón de mi afán no estaba allí.
El resto de la mañana se paso volando.
Cuando salimos al estacionamiento ya Alice estaba allí, eso significaba que seguramente habían salido de clases hace rato y ella ya debía haberse ido.
Jacob, Quil, Embry, Jasper y yo nos fuimos a La Push, casa de los Clearwater habría pescado frito a la Harry y hasta papá pasaría por Billy e iría por allá más tarde. Compramos refrescos y algunas chucherías en el camino. Seth nos esperaba en casa con un nuevo juego para su consola, uno de autos, ese si no era para nada mi fuerte, pero para pasar el rato estaba muy bien. Jugamos por turnos, Jake y Jasper eran los campeones invictos, seguidos por Seth y Quil, Embry y yo no figurábamos en el cuadro de honor.
Después de un rato el ruido de los chicos comenzó a agobiarme y decidí salir al patio para tomar aire. Me recosté de una de las paredes laterales de la casa con la vista perdida en el horizonte cuando escuche unos sollozos que venían de la parte de atrás de la casa.
No pude evitar buscar el origen del sonido y encontré a Leah sentada en el piso con la cabeza sobre las rodillas, esforzándose mucho por ahogar su llanto, era evidente que quería evitar ser escuchada, y lo habría logrado si yo no hubiese salido de la casa.
Por un momento pensé en regresar por donde había venido y dejarla llorar, pero cuando decidí moverme fue demasiado tarde, la escuche decir con voz entre cortada
-          Edward, ¿Cuánto tiempo llevas ahí?
-          Acabo de llegar ¿Te encuentras bien?
-          Si no te preocupes - quiso tranquilizarme y una mueca que trataba de simular una sonrisa cruzo su rostro.
El esfuerzo fue más de lo que pudo soportar y rompió a llorar de nuevo.
No pude quedarme más tiempo sin hacer nada, me senté junto a ella y pase mi brazo sobre sus hombros, al principio se sobresalto pero luego me miro con los ojos llenos de lagrimas y expresión apenada. Bajo el rostro y lo escondió sobre mi pecho.
-          No tienes que contarme nada, pero estoy dispuesto a escucharte si necesitas desahogarte. Demás está decirte que nada de lo que me digas saldrá de entre nosotros dos – dicho esto la apreté suavemente contra mí y la deje llorar un rato mas.
Unos minutos después suspiro fuertemente y levanto el rostro secando sus lágrimas.
-          Edward, muchas gracias por soportar esta escena tan deprimente, no quisiera molestarte con mis tonterías – comenzó a llorar de nuevo.
-          No te preocupes Leah estoy seguro que lo que te tiene así no puede ser ninguna tontería – respondí y levante un poco su rostro para mirarla a los ojos.
Tomo aire como si le costara respirar normalmente y continúo.
-          Es Sam, no ha venido a la casa por más de dos semanas fui a buscarlo a su casa pero su mamá tampoco sabe donde está, ella también está muy preocupada por él. Están organizando un equipo de búsqueda y me han pedido que me quede en casa por si regresa o llama, yo no creo que lo haga. Quise entrar para avisarle a los chicos pero no pude más con el dolor y solo pude llegar hasta aquí.
-          Oh lo siento tanto, debemos avisar a los chicos ellos querrán ayudar en algo -  ella asintió mientras la ayudaba a ponerse de pie y no solté sus hombros para que se apoyara de mi en el camino a la casa.
En cuanto entramos Sue, que estaba llevando unos refrescos al salón para los chicos, nos miro sobresaltada casi dejo caer la bandeja de no ser por Jasper que estaba cerca de ella y la tomo en el aire, así hubiese sido.
Corrió hacia nosotros y tomo a Leah entre sus brazos mientras me interrogaba
-          ¿Qué ha pasado? ¿Hubo alguna noticia de Sam?
Ya me sentía abrumado por el sufrimiento de Leah y solo negué con la cabeza para luego susurrar
-          Están organizando unos equipos de búsqueda –
Ya los chicos habían apagado el televisor para poder escuchar lo que pasaba me miraban atónitos.
El primero en reaccionar fue Embry seguido por Jacob quien tomo su chamarra del perchero y se apresuro a la puerta mientras decía
-          Vamos a la casa de Sam para ver en que podemos ayudar –
-          Espérame escuche decir a Seth –
Cuando salimos de la casa vi el auto de mi padre que se detenía detrás del mío y puso cara de preocupación al ver nuestros rostros.
Me acerque a él y le di un rápido resumen de lo sucedido, el me pregunto por Billy ya que había pasado por su casa y no lo había encontrado. Ambos nos imaginamos que estaría en casa de Sam pero acorde avisarle si no lo encontraba allá al llegar.
Levanto la mirada hacia Sue que se encontraba abrazando a Leah junto a la puerta de la casa, abrió la puerta del auto, tomo su maletín y se dirigió a la casa no sin antes decirme
-          Ve hijo, pero ten mucho cuidado.
Asentí y me uní a los demás para irnos a casa de Sam que no estaba muy lejos de allí.
Había ya bastante gente frente a la casa cuando llegamos, no fue difícil notar que Billy estaba allí escuchamos su voz mientras organizaba los grupos de búsqueda, daba instrucciones y dividía los territorios de manera de cubrir la mayor cantidad de terreno posible en el menor tiempo.
Al vernos nos hizo un ademán con la mano para que nos acercáramos, nos señalo una mesa donde habían linternas tomamos tres y nos indico la parte del bosque donde buscaríamos nosotros, nos pidió regresáramos en no más de tres horas sino encontrábamos nada, no quería tener que organizar otro grupo para que fueran por nosotros.
Caminamos más de una hora, apenas empezaba a anochecer. Estábamos tensos, y Seth de vez en cuando hacia alguna broma para relajar un poco el ambiente, después de un rato había logrado su cometido.
Ya había anochecido cuando decidimos regresar tomando otro camino hacia la casa de Sam. No habíamos visto nada que indicara que él hubiese estado por allí.
Apenas habríamos caminado unos diez minutos cuando vimos un animal muerto, era un ciervo macho muy grande con una hermosa cornamenta. Parecía que acababa de morir de hecho al acercarme pude sentir que aun emanaba algo de calor de su cuerpo, lo raro de todo era que se veía seco, como si hubieran sacado toda la sangre de su cuerpo. Todos mirábamos al animal curiosamente cuando escuchamos un ruido detrás de nosotros, estaba oscuro no podíamos ver nada alrededor, le quite la linterna de las manos a Jasper y alumbre hacia el sitio donde había escuchado el ruido. No había nada.
Tuve una extraña sensación que recorrió mi cuerpo, no dije nada pero estaba seguro de que algo o alguien nos estaba mirando.
Llegamos a casa de Sam poco pasadas las once de la noche, mi padre estaba allí. No hubo noticias de Sam ese día. Todos muy abatidos regresamos a casa de los Clearwater.
Leah estaba sentada frente a la casa, al mirar nuestros rostros supo que nada había cambiado. Entro a la casa supe que estaba llorando.
Nos despedimos de todos y quedamos en regresar al día siguiente por la tarde para ayudar con la búsqueda de nuevo. Papá llevo a Jake y a Billy a su casa. Yo lleve a Jasper a la suya y me fui a casa.
Estaba realmente cansado cuando llegue, mama nos esperaba en el recibidor, estaba muy preocupada. Le dije lo sucedido y me despedí ya no podía mantener los ojos abiertos por más tiempo.
Me di una ducha rápida con agua muy caliente para relajarme y me puse un mono de dormir y me tire en la cama.
Mi cabeza no habría siquiera tocado la almohada cuando ya estaba dormido.
Estaba en medio del bosque, junto a mí en el suelo estaba el ciervo muerto que vimos esa misma noche y entonces me sobresalto un ruido detrás de mí. Busque entre los árboles, no había nada o al menos yo no lo podía ver. Mi instinto de supervivencia me dijo que debía irme de allí que debía correr.
Me desperté sudando era uno de esos sueños extraños en los que alguien te persigue y por más que corres no logras escapar. No sabía de quien o de que corría, yo solo corría.




5 comentarios:

Princcipessa Cullen dijo...

Wow!!! OmG!!!
El camino que le diste a la historia me encanta!!!
Ahora Bella es vampiro??? y Ed solo un motal???
Por favor sube otro cap. pronto... no me dejes así!!!
Simplemente tu historia es atrayente!!!
Felicidades!!!
xOxO

Unknown dijo...

Si! ahora se cambian los papeles Guau!, será fabuloso comprobar ahora la fuerza de Bella, la fuerza de mi Gaby. Geniaaal. Besotes miles

Anónimo dijo...

WOW hermani
me dejas en shok, es muy imprecionante
me encanta, porfa queremos otro capi:P
* Gaby Cullen Black *

Unknown dijo...

wow esta genial!!!
el blog te quedo super y espero que sigas con la historia!!!
porfavor no te desanimes que esta genial y espero el proximo capi lo mas rapido posible jejeje
suerte!!
♥♥♥

Anónimo dijo...

nena cullen:me encanta por cada capi que leo me quedo mas pillada mi gaby eres genil me encanta los capi que escribes no lo dejes nuca preciosa